20-04-2018. UN MONSTRUO DE VORACIDAD INSACIABLE
Como cada año, cuando llegan estas fechas, se nos viene encima el trámite engorroso de la declaración de la Renta, algo que para muchos ciudadanos representa un singular combate con los confusos mecanismos burocráticos que la Administración española tiene establecidos cómo fórmula adecuada para entretenernos y hacer que durante un tiempo nos ocupemos en algo más que ver la TV. Hacienda, dice, viene realizando un notable esfuerzo por simplificar los trámites y hacerlo todo asequible y fácil de digerir, lo cual puede ser relativamente cierto en aquellos casos de vida absolutamente sencilla, la nómina y nada más, sin ningún otro aditamento, pero basta que en el horizonte personal se dibuje una escueta complicación (un ingreso extra, una acción bancaria, una herencia, una subvención, una anomalía funcional) para que el aparente sencillo trámite se transforme en una extraordinaria complicación de la que siempre resulta difícil salir airoso. Es una batalla singular, en que el ganador